Me gusta más estar con quien quiero estar, y menos con quien no. Pero no es tan fácil.
Las apariencias siguen comiéndome por dentro, y poco a poco esa necesidad de aparentar lo que no soy, va desapareciendo.
Lo que cuesta más es ese cambio por dentro.
Choques y más choques cada pocas semanas. Encuentros y desencuentros en mi misma que me dejan agotada.
¿Qué soy? ¿Quién no soy?¿Me querrán así?
¿Qué soy? ¿Quién no soy?¿Me querrán así?
O...
¿Me quiero yo así?
La eterna pregunta.
¿Me quiero yo así?
La eterna pregunta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario